Hermano Saulo

La escritura de hoy :

«Señor, por favor, envíame donde quieras pero no allí». Esta era mi oración de joven, antes de ir a otro país en un intercambio estudiantil. No sabía adónde iría, pero sí adónde no quería ir. No hablaba el idioma de ese país y mi mente estaba llena de prejuicios contra su gente y costumbres.

Pero Dios, en su sabiduría infinita, me envió precisamente adonde yo no quería. ¡Estoy tan feliz de que lo hizo! Cuarenta años después, todavía conservo queridos amigos en esa tierra. Cuando me casé, Stefan, mi padrino de boda, vino de allí. Cuando él se casó, viajé a devolverle el favor. Y estamos planeando otra visita pronto.

¡Suceden cosas hermosas cuando Dios produce un cambio de corazón! Esta transformación se ilustra con solo dos palabras: «Hermano Saulo» (Hechos 9:17).

Las dijo Ananías, un creyente en Dios llamado a curar la ceguera de Saulo después de su conversión (vv. 10-12). Al principio, Ananías se resistió por el pasado violento de Saulo, diciendo: «Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén» (v. 13).

Pero obedeció y fue. Y por ese cambio de actitud, ganó a un nuevo hermano en la fe, el nombre de Saulo fue cambiado por Pablo y la buena noticia de Jesús se difundió con poder. ¡Dios siempre puede producir un cambio verdadero!

De:  James Banks

Reflexiona y ora

¿En qué área de tu vida Dios te está llamando a cambiar de actitud? ¿Cómo puedes alentar hoy a un creyente nuevo?
Jesús, ayúdame a alcanzar a otros.

0 Comentarios

Añadir Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *